La vida se compone de ciclos. Cada ciclo nos da la oportunidad para aprender cosas nuevas al superar los retos a los cuales nos enfrentamos.

Dentro de unos días, por no decir horas, se acabará el periodo de gobierno de Ivonne Ortega Pacheco. Honestamente confieso que en tiempos de precampaña hace seis años no tenía una gran esperanza de triunfo en Ortega Pacheco. Sin embargo, sorprendió a muchos, se hizo de la candidatura y logró, aún con la presidencia y el gobierno del PAN en turno al momento de las elecciones, triunfar y convertirse en la primera mujer en ganar una elección para ser titular del Poder Ejecutivo del Estado.

A la oposición las cosas no le funcionaron bien. Para la “alta alcurnia” del PAN era inadmisible que una mujer del interior del estado, cuya historia es de superación constante tanto en su persona y comprometida con el trabajo logre ganarles la partida. Desde el principio hicieron mofa de esas condiciones de origen pero que no le causaron daño, ya que éste no la avergonzaba, sino al contrario, en varias ocasiones ejemplificó y justificó sus acciones a partir de ese esfuerzo individual que la condujó a convertirse hoy en una del selecto grupo de 300 líderes mundiales.

Lo que si es cierto, que aún cuando algunos promesas de campaña no lograron concretarse como aquella del tren rápido, no se aleja de la realidad política que lleva a matizar las acciones de un gobernante. Veamos el caso de Felipe Calderón, el que se hizo llamar el “presidente del empleo” que es hasta el final de su sexenio cuando se interesa en crear las condiciones para mejorar el marco legal laboral en el país.

Pero en lo que si ha cumplido este quiquenio de Ivonne Ortega es consolidar la seguridad y la justicia en la entidad. A pesar el hecho aislado de los decapitados, hasta el mismo Felipe Calderón ha resaltado y calificado a Yucatán como una de las entidades federativas más seguras de la entidad. Aún cuando quisieron aprovecharse de aquel evento y de los hechos particulares y aislados, los yucatecos podemos sentirnos tranquilos en las calles y carreteras de la entidad.

Pero también se encuentra la reforma al Poder Judicial del Estado que encabezada por la gobernadora el Estado y la colaboración conjunta de los demás poderes de la entidad se logró una transformación modelo a nivel nacional. Hoy los yucatecos contamos con instituciones judiciales fuertes y respetuosas de los derechos humanos, con instrumentos legales para la defensa y conservación de los intereses tutelados por la ley.

No se puede tampoco negar que Yucatán recuperó liderazgos en materia educativa con mayor inversión e infraestructura concentrada en acciones claras y visibles a favor de la educación, mucho más de lo que se hizo en los últimos 20 años. En deportes Yucatán destacó como sede de importantes eventos y destacaron deportistas como punteros en diversas disciplinas con el apoyo decidido de la titular del Poder Ejecutivo.

¿Cuántas veces no nos quejamos del exacerbado provincionalismo que provocaba que Yucatán quedara fuera de grandes eventos, de visitas de artistas, obras de teatro y fuera de las producciones televisivas nacionales que ayuda a posicionar el turismo de los lugares en donde se llevan a cabo?

Yucatán garantiza ser una atractiva sede para eventos importantes, que cuenta con la infraestructura y la calidez de la gente comprometida con su estado.

Yucatán ha crecido estos años, así lo ha reconocido la administración federal. Es mucho más seguro y más justo.

En materia política no hay duda del liderazgo de Ivonne Ortega Pacheco. Si un “buen gobierno, genera votos”, durante este quiquenio el PRI logró ganar todo en las elecciones intermedias y conservar la gobernatura y la mayoría de municipios y diputados locales en el último proceso electoral.

Posiblemente habrán aún rezagos que se tengan que continuar trabajando. Los grandes problemas sociales no se solucionan de un día para otro, sino que requieren del trabajo conjunto de todos.

Las bases para continuar con ese trabajo están puestas en la mesa del compromiso, lo que falta es ya dejar atrás los odios y los traumas personales para coincidir en lo importante. Lo importante es Yucatán.


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