El Centro de Estudios de Derecho e Investigaciones Parlamentarias (CEDIP), de la Cámara de Diputados, presentó el libro “Decretos de Oro”, del autor José Luis Camacho Vargas, el cual evoca los nombres de mujeres y hombres que con su obra, vida e ideas contribuyeron a consolidar a México como nación, y están inscritos en el Muro de Honor del Palacio Legislativo de San Lázaro.

Esta segunda edición, publicada por el Consejo Editorial, presidido por la legisladora Emma Margarita Alemán Olvera (PAN), reseña la historia del país a través de la inscripción en Letras de Oro de los nombres, apotegmas o instituciones que por su valor son dignos de permanecer en los muros del recinto parlamentario.

La diputada Patricia Aceves Pastrana (Morena), integrante del Consejo Editorial, destacó la importancia de esta obra cuya referencia histórica facilita el aprendizaje con las biografías de mexicanos que contribuyeron a construir el país.

No obstante, dijo, se requiere incluir en el Muro de Honor a otros personajes que se han significado en la cultura, educación, ciencia, tecnología y a los grandes pensadores, mediante la inscripción de sus nombres con Letras de Oro.

“Un pueblo que no tiene memoria, no reconoce su pasado ni sus raíces; no alcanza el esplendor ni tiene una cultura firme, lo cual da identidad y amor al país para evitar derrumbarse y afianzar el nacionalismo”.

Cuestionó que sean pocos los nombres de mujeres inscritos en el Muro de Honor de la Cámara de Diputados. Hasta 1946, se encontraban Josefa Ortiz de Domínguez, Leona Vicario, Mariana Rodríguez del Toro y Antonia Nava, como heroínas insurgentes; en 1948, se reconoce a Margarita Maza; en 1966, a Carmen Serdán, y hace 23 años, a la única mujer del periodo colonial, Sor Juana Inés de la Cruz.

Sadot Sánchez Carreño, director general del CEDIP, señaló que el libro “abre el pasado como enseñanza proyectada al porvenir” con la síntesis histórica de México, mediante biografías y decretos aprobados por los diputados federales para inscribir en letras doradas los nombres de mexicanos que coadyuvaron a afianzar el significado de nación. Mujeres y hombres que respondieron con su ejemplo a los retos que les impuso su tiempo.

Las vidas y trayectoria de los personajes cuyos nombres están inscritos en el Muro de Honor, avivan la inteligencia y conciencia libertaria para evitar cualquier tipo de sometimiento, apuntó.

Explicó que “en breves relatos la obra recrea el pasado, cimiento de la patria”. Son ocho capítulos que plasman la vida de personajes desde la época prehispánica, con el joven abuelo, Cuauhtémoc; transporta al movimiento de liberación nacional y a la Independencia; la Generación del siglo XIX con la Reforma; la Revolución de 1910; los Congresos Constituyentes; reconocimiento a los defensores de la libertad hasta el México contemporáneo.

Además, refiere a las más importantes instituciones educativas, como UNAM, IPN, Heroico Colegio Militar y la Escuela Naval Militar.

Ofrece un capítulo del Palacio Legislativo de San Lázaro vinculado al arte, a través de los murales, óleos, bustos, estatuas, la Rotativa Constituyente, placas conmemorativas, y el relieve escultórico de la Plaza de Los Constituyentes de 1917, cuyos mensajes plasman la historia en el tiempo.

El politólogo Fernando Rodríguez Doval destacó que “Decretos de Oro” es una obra de “auténtica ciencia histórica”, porque ofrece una espléndida investigación historiográfica de cada decreto que culminó con la aprobación de inscribir un nombre en el frontispicio del Salón de Plenos.

Sin embargo, indicó la necesidad de inscribir en letras doradas a más mexicanos de diversas épocas y tendencias políticas e ideológicas que forman parte de nuestra historia y que no están en el Muro de Honor. De la época virreinal sólo a Sor Juana se le reconoce, pese al esplendor artístico que forjó la nacionalidad mexicana, producto de dos civilizaciones milenarias.

Refirió la importancia del parlamentarismo que rebasa los 200 años en un proceso de consolidación de México como un Estado nacional. “Con este libro tenemos la oportunidad de acercarnos nuevamente a la historia que ayude a la reconciliación que tanta falta nos hace a los mexicanos”.

El autor José Luis Camacho Vargas señaló que gracias a la pluralidad de ideas políticas México cada día es mejor y distinto. Agradeció la segunda edición de “Decretos de Oro”, con prólogo de la historiadora Patricia Galeana.

Indicó que después de que se inaugura el Salón de Plenos, del actual Palacio Legislativo de San Lázaro, en 1981, se han realizado 17 inscripciones en el frontispicio de honor.

Camacho Vargas analiza las 76 inscripciones con Letras de Oro que se encuentran en el Muro de Honor. Son un total de 60 nombres, siete mujeres y 53 hombres; tres procesos constituyentes; siete movimientos armados que defendieron la soberanía e integridad nacionales; cuatro instituciones educativas y la enunciación de dos apotegmas.

Propuso inscribir en el Muro, la palabra Federalismo; la frase a los maestros de todos los niveles educativos de México, y a la juventud, la cual ha demostrado su compromiso con las causas comunes, así como incorporar a muchos personajes más.


Espero que esta publicación sea de tu interés. Me gustaría seguir en contacto contigo. Por lo cual te dejo mis principales redes para dialogar y comentar los temas de interés para la sociedad y nosotros.