Sobre el primer caso llama la atención que, como pocas
veces, hemos visto los mexicanos, por lo menos en los últimos 30 años, el
cuerpo legislativo nacional no había trabajado con mucho compromiso y análisis
crítico y propositivo en la búsqueda de una reforma energética acorde con la
capacidad técnica y operación política actual.
El resultado ya todos los conocemos. No fue una reforma
fast-track como inicialmente se supuso en la siempre verticalidad en la cual
ambas Cámaras Legislativas actuaban con iniciativas presidenciales. Lo que
originalmente fue la intención de Felipe Calderón Hinojosa de privatizar
algunas áreas productivas de PEMEX, quedó plenamente desechado en los
dictámenes de decreto, que en votación por una gran mayoría ya se convirtieron
en ley.
No es hay victoria para nadie. Ni del Presidente como
tampoco del PRD, ni tampoco del PRI y los demás partidos pequeños, porque en la
verdad de los hechos todos contribuyeron a que salga, si no la ideal, por lo
menos, si la posible en el interés de encontrar los mejores caminos de solución
a un problema que requería la atención de todos. Ni Felipe pudo imponer su
criterio, como tampoco el PRD le huyó a la cita con la historia como un partido
abierto al diálogo y a la razón dejando atrás la orden de mandar al diablo a
las instituciones, como el PRI que ya muestra una mayor madurez y aspiraciones
democráticas. Caso especial del Verde Ecologista que incluyó en la discusión el
tema de energías renovables, lo que abre posibilidades de un tránsito hacia la
modernidad en la generación y distribución de este tipo de energéticos.
Entonces, ¿cómo entender la oposición de Andrés Manuel López
Obrador ante lo que resulta un trabajo serio y comprometido del poder legislativo?
Ahora resulta que todo se origina por unas simples doce
palabras que no fueron, a su parecer, incluidas en la nueva legislación.
¿Bastan doce palabras para descalificar todo el trabajo legislativo?
¿Acaso se equivocan todos los expertos y legisladores cuando
aseguran que no hay ningún rastro de privatización en el marco jurídico
aprobado?
Lo único que me queda claro es que fueron doce palabras,
como si fuera sido una y otro cosa, lo que mueve a López Obrador a apostar a
descalificar al que considera “espurio”. Lo importante es solo oponer, no
sumar, ni dialogar, menos conceder para poder avanzar. Es la oposición
sistemática, sin importar que con ello arrastre al país hacia la
ingobernabilidad y el estancamiento por querer imponer su solo criterio: el suyo.
El PRD ya se dio cuenta de que el camino emprendido por
Andrés Manuel López Obrador no es el indicado. En la realidad los perredistas
han perdido mucho terreno en la competencia electoral. El gran capital político
que representó quedarse atrás por la mínima expresión en el 2006, hoy en la
percepción ciudadana se le castiga por su altanería y arrogancia.
¡Qué lástima que se confunda el camino! En el fondo, lo que
afirma con respecto a los retos y necesidades de desarrollo no está tan
equivocado; pero el problema son las formas que incomodan, que alterna la paz
pública, la institucionalidad de los organismos y la ley misma. Esto ya lo ha
convertido en lo que los demás, en un pasado muy cercano, afirmaron de él si
llegaba a la presidencia.
Es esa misma intransigencia que hoy provoca que el PRD no
tenga un liderazgo reconocido por faltar a la práctica democrática con valores
y ética, honestas, justas y respetuosos de la libertad de elección. Tanto que
critica a Elba Esther Gordillo, a quien considera uno de los factores que
provocan todos los males de México, pero que también se comporta como el gran
cacique que desea imponer estrategias que incitan a la inestabilidad política,
solo porque así lo desea, porque si no fue él, el que provoca los cambios, entonces
nadie lo será. Ese es al parecer su único lema, su consigna, su estandarte.
Las palabras de Francisco Labastida Ochoa fueron proféticas.
Afirmó, en una interpretación de lo que sucedería en las afueras de los
recintos legislativos, que pocas voces no podrían contra la fuerza de la
negociación política y compromiso serio en la búsqueda de soluciones para el
desarrollo energético del país.
Irónico que los primeros que se quejan de la protección
policiaca en edificios, tanto fuera como dentro de ellos, son los primeros en
violentar el transcurso legal de las sesiones.
A todo eso, muchos mexicanos… muchos más cada días, es que
no apoyamos las formas antidemocráticas e irrespetuosas que Andrés Manuel López
Obrador quiere imponer en México. Hay quienes ya lo entendieron, más otros
siguen ciegos.
A modo de felicitación: Pocas instituciones educativas se
pueden orgullecer de trascender el tiempo por generaciones. El Instituto Eloísa
Patrón de Rosado, en el presente curso escolar, celebran 80 años de dar
servicio educativo a los habitantes de toda la Península de Yucatán. Ahora es
la cuarta generación de una familia que se compromete día a día a ayudar a
padres de sus alumnos en proporcionarles la mejor educación.
A modo de reflexión: como dijera Juanes “a dios solo le
pido” que al final de mi vida me otorgue la humildad para no presumir de tantas
cosas materiales en mi persona, que me hagan olvidar lo importante que es la
RESPONSABILIDAD y la LEALTAD a quienes me han apoyado y ayudado. Es que en el
mundo, sin irnos más lejos, a nuestro alrededor, hay quienes se envilecen y
pierden el piso por no entender que al final: todos somos iguales.
Espero que esta publicación sea de tu interés. Me gustaría seguir en contacto contigo. Por lo cual te dejo mis principales redes para dialogar y comentar los temas de interés para la sociedad y nosotros.
