Gaceta ParlamentariaEn días pasados, como parte de una actividad formativa en la asignatura de Técnica Legislativa, impartida por la Lic. Aurora Gutiérrez Fernández, en la Licenciatura de Derecho que actualmente estudio en el Centro de Estudios Superiores, se solicitó una investigación sobre las reformas que se proponen en materia de inmunidad o fuero constitucional, específicamente en los artículos 110 y 111 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

En verdad se antojaba fácil cumplir. Bastaba entrar a la página web de las Cámaras para acceder a las publicaciones electrónicas de las gacetas parlamentarias correspondientes, emplear la opción de búsqueda, leer, analizar y concluir. La ventaja de la Internet es precisamente facilitar el acceso a la información pública de manera más amplia y directa.

Sin embargo, nos topamos con mucha dificultad para lograr con éxito la tarea por la falta de un control registral efectivo para darle seguimiento al procedimiento legislativo de cada una de las iniciativas que se presentan. Tal es el caso de la Gaceta Parlamentaria de la Cámara de Diputados que tiene una opción de búsqueda de palabras específicas para encontrar iniciativas que producen listados de documentos donde éstas se encuentran. El problema es que después de publicada, ya no hay una manera de darle una continuidad a que va sucediendo con ella. Hay otra opción de votaciones, pero ya corresponden a los dictámenes de comisiones que se presentan al pleno, que por procedimiento legislativo ya sufrió modificaciones de la propuesta original. No hay manera de establecer inequívocamente la relación del dictamen con una iniciativa de forma clara y precisa. Lo que hace tardado, tequioso, sin aprovechar la ventaja tecnológica que nos ofrece la indexación de documentos por IDs y la hipervinculación entre documentos que nos permite la publicación en la web.

Como bien me dijera un master de diseño de páginas web hace un tiempo, los criterios esenciales para publicar en la Internet es fácil manejo, humildad de recursos y accesibilidad a toda la formación. Criterios que no cumplen las publicaciones de las gacetas parlamentarias de las Cámaras de Senadores y Diputados.

No basta de decir: lo tenemos publicado. Ese es sólo el inicio, el primer paso. Es necesario dotar de la infraestructura que nos permite la tecnología web para la manipulación de la información. Para ello se requiere de analizar el proceso legislativo y las rutas que lleva una iniciativa.

La tarea es compleja. Más cuando, por procedimiento legislativo, son ambas cámaras las que intervienen en la creación de leyes. Si de por sí, hoy en día es difícil consultar lo que sucede dentro de una de ellas, cuando la discusión pasa de la de origen a la revisora, se pierde la conectividad al operar cada una de las cámaras de forma independiente. ¿Cómo concretar entonces un efectivo análisis del quehacer legislativo?

AL CALCE. Al respecto hay que hacer una felicitación a los Diarios Oficiales de la Federación y de la entidad, así como también al Poder Judicial de la Federación con el sistema de consulta IUS que facilita la búsqueda y lectura de las jurisprudencias de forma ordenada, precisa, sistemática y funcional. Se plasma un trabajo tendiente a facilitarnos el acceso a la información que cada uno de ellos controla. Ejemplo especial es el esfuerzo que se ha hecho en la entidad para crear el Sistema de Legislación y Normatividad Digestum, que puede ser accedido desde la página web del Congreso de Yucatán y del Poder Judicial del Estado, y es una compilación de los códigos, leyes y reglamentos vigentes en Yucatán.

Como nota complementaria a toda la crítica que se ha hecho a las gacetas parlamentarias federales, no se entiende el por qué se regalan dispositivos electrónicos de IPADs a los legisladores, si la intención de publicar en la Internet la información pública del quehacer legislativo no es funcional.

AMASIATO GOBIERNO – WINDOWS. Tocando el tema principal la infraestructura electrónica vale la pena comentar que el mundo tecnológico ya no le pertenece todo al sistema Windows como lo fue en un antaño mediamente lejano. Hoy en día tenemos máquinas Mac, Linux, Android y se están desarrollando otros sistemas operativos que día a día son usados por comodidad, seguridad y gusto de los usuarios. Sin embargo, si nos detenemos a ver el software que el gobierno usa como es el caso de la SHCP predomina el desarrollo de las aplicaciones en la plataforma Windows. Para quienes optamos ya no seguir en el juego de la compra de sistema, y en su imposibilidad a la piratería, además de la seguridad y el mejor rendimiento en sistemas, los que elegimos Linux en cualquiera de sus distribuciones estamos fuera de posibilidad de usar los sistemas de gobierno en las computadoras personales. ¿Por qué seguir el juego de una empresa comercial y no considerar las otras opciones cuyo desarrollo son gratuitos, más seguros y democráticos?

Debería desarrollarse software en los otros sistemas operativos. Eso sí sería democrático.


Espero que esta publicación sea de tu interés. Me gustaría seguir en contacto contigo. Por lo cual te dejo mis principales redes para dialogar y comentar los temas de interés para la sociedad y nosotros.